Reseña
Ólafur Arnalds - For Now I Am Winter
Fecha de Lanzamiento: 25/02/13
Sello: Mercury Classics
País: Islandia
Estilo: Clásico contemporáneo
Artistas similares: Nils frahm, Max Richter, Johann johannsson, Luigi Rubino, Clint Mansell
Track list:
01 – Sudden Throw
02 – Brim
03 – For Now I Am Winter
04 – A Stutter
05 – Words Of Amber
06 – Reclaim
07 – Hands Be Still
08 – Only the Winds
09 – Old Skin
10 – We (Too) Shall Rest
11 – This Place Was A Shelter
12 – Carry Me Anew
13 – No.Other (Bonus Track)
Hace casi exactamente un año, Olafur comenzó a hablar de esta producción, por medio de su página de Facebook, mostraba pequeñísimos fragmentos de sus piezas, y algunas fotos de las grabaciones, del estudio, la orquesta, y ya se hablaba de la colaboración vocal de Arnor Dan de la banda islandesa “Agent Fresco”.
Durante todo el 2012 también publicó “Two songs For Dance”, y un disco en colaboracion con Nils Frahm, un soundtrack original para la pelicula “Another Happy day” (que por cierto, esta buenisimo) tambien anuncio que estaba trabajando en el Score de otra película llamada “Gimme Shelter” de la cual aún no se sabe mucho, y también una musicalización de un documental, entre otras muchas cosas. Para Noviembre, dio la Noticia de su nueva alianza con el sello “Mercury Classics”, una división de Universal Music; y planteó por primera vez que su música daría un ligero y amistoso cambio.
Mis primeras impresiones sobre el disco, al escuchar el trailer, (que fue la canción de “Sudden throw” y más adelante “This place was a shelter”) fueron bastante buenas, ya se notaba el sonido Épico de sus composiciones por primera vez orquestadas, pero también siguiendo la misma línea de minimalismo y ambiente siempre creado por este compositor.
Debo decir que no esperaba que la Colaboración vocal fuera tan extensa y relevante, y mis primeras impresiones sobre ella al escuchar “old skin” no fueron muy buenas, parecía como si estuviéramos escuchando un proyecto completamente nuevo que no sonaba nada mal, pero que tenía muy poco que ver con lo que conocemos de Olafur Arnalds. Ahora después de escuchar todo el disco supongo que es una de las apuestas más “comerciales” y más Pop del disco, lo cual no es para nada malo, pero si bastante diferente. Por alguna razón lo relaciono más con el sonido de bandas como Efterklang en sus últimos trabajos, o Bon iver.
Acerca de la incursión de la voz, creo que un músico como Olafur Arnalds, esta en pleno derecho de la experimentación, es un giro interesante y también inteligente, porque, en vez de limitar sus composiciones (como muchos pensamos que pasaría al utilizar voces) la lleva a caminos diferentes, no menos bellos de los que estamos acostumbrados con su música.
Las partes vocales son un tanto difíciles de digerir para los que ya conocemos el sonido de este compositor, ya que de pronto nos encontramos con melodías muy distintas, ya no siempre lideradas por las cuerdas, sino por la voz, razón por la que estas mismas se ven obligadas a tener una participación mucho más rítmica. En otras canciones la voz se funde completamente con las cuerdas haciendo una fusión perfecta, como si fuera solo una parte más escrita junto con las voces de los violines, “A Stutter” por ejemplo, es la fusión perfecta entre el estilo ya conocido de Olafur, y la Voz de Arnor Dan, un piano minimalista, una atmósfera constante que te mantiene ligeramente expectante y unas cuerdas que te envuelven junto con el suave y parsimonioso hilo de la voz.
En mi opinión, las obras más relevantes de este álbum y las que marcan la pauta para la notable evolución de este asombroso compositor son “Brim”, “Reclaim” y “Only The Winds”, todas ellas con un corte mucho más orquestal y cinemático que por momentos me recuerda ligeramente el estilo de Clint Mansell. La primera de ellas, menos minimalista, con loops más agresivos y la orquesta de cuerdas arrasando con una melodía constante “in crescendo”. La segunda, con la elegante voz como un faro que guía a los demás instrumentos, haciéndolos parte del discurso,casi como si fuera una ópera moderna, los vientos hacen a esta pieza una obra maestra. En la tercera podemos encontrar lo que en mi opinión, es la esencia de Olafur, altamente potenciada, una solemnidad absoluta en la sencillez de una melodía que va y viene, y en cada subida nos dice y hace sentir cosas distintas. Una pieza para inyectarnos una dosis de melancólica esperanza.
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